domingo, 30 de noviembre de 2014

Jornadas gastronómicas en el "Jai-Alai" Salvatierra

Este jueves pasado Beñat el comemundos panadero se estrenó como showcooker en la casa de Juanjo Barquilla, el "Jai-alai" en Salvatierra. Ofreció un taller de pan con el objetivo de hacer ver a la gente que, hacer pan en casa es cuestión de ganas y un poco de paciencia, pero sobretodo de tener amor por hacernos nuestros propios alimentos llenos de buenos ingredientes y geniales para nuestra salud y también para la de los que tengan peques en casa, en este caso se duplica la emoción de hacerlo ya que ellos alucinan mezclando y tocando las masas! Y no digamos el momento de ver crecer la hogaza en el horno, eso es mágico!

La charla comenzó con la presentación de la jornada a manos de Roberto Castro, dueño de la tienda "La Despensa" en Agurain es el que se encarga de llevar el ingrediente estrella a cada jornada, esta vez, el txitxarro, con el que posteriormente se elaborarían los tres pintxos de la tarde, Kike pil-pilean fue el cocinero encargado de las delicias que mostraré después, un chef de alto copete que sabe tratar el producto como pocos.



Vamos con el taller, el comemundos Beñat elaboró varios tipos de pan para la ocasión y explicó a grandes rasgos como preparar pan en casa de una manera sencilla y con ingredientes buenos, para ello sacó de la nevera de casa a unas inseparables compañeras de faena, nuestras masas madre, que estuvieron encantadas de que las miraran, olieran y tocaran. Además Beñat nos deleitó con siete tipos de harinas diferentes que nos sirvieron para ver las diferencias entre unas y otras y sobretodo para darnos cuenta de que el repertorio de panes que podemos crear es infinito, adaptable a todos los gustos.



Para que todos comprendiéramos lo fácil y bonito que es hacer pan en casa, Beñat mezclo un poco de harina y agua en un bol y lo fue pasando por la sala varias veces para que todos lo tocásemos, sin miedo, y sintiésemos como esa masa, simple, iba cambiando a medida que varias manos inocentes la amasaban sin darse cuenta, al finalizar la charla, esa masa se había convertido en un pequeño pan al que solo le faltaba reposo y el calor del horno, creo que ese fue el momento en el que todos abrimos nuestra mente a la posibilidad de hacer esta maravilla en casa, el pan se había hecho solo, nadie lo sabía.



Y llegó el momento de presentar los diferentes panes que hizo y por supuesto de probarlos, como no podía ser de otra manera, dos de ellos estaban hechos con té, uno con té matcha japonés, y el otro con un té ahumado, un lap sang shou chong. Además tuvimos un pan de leche vegetal con aceite de oliva, un pan de centeno, pequeñas chapatas, un pan de espelta integral que se usó como base de uno de los pintxos de la jornada y un par de hogazas con harinas diferentes, más y menos fuerza, para poder distinguir bien que pasa con la miga si utilizamos una harina u otra, sobra decir que cada pan llevaba su masa madre y además todas eran ecológicas, una verdadera delicia...







Después del taller llegaron los pintxos, el primero, txitxarro marinado sobre un pesto de té sencha, avellanas, sal de añana con toques de tomate y aceite de oliva virgen extra con el pan de espelta de nuestro panadero casero. No tengo palabras para definir lo sabroso que estaba, todo encajaba a la perfección.



El segundo pintxo fue un rollito de primavera relleno de txitxarro, verduritas y un punto de salsa de soja  que lo hacía sabroso y rico, el punto crujiente del rollito con el pescado era fantástico!

Y por último, para coronar la jornada, degustamos el txitarrito a la plancha sobre una cama de crema de apionabo y couscous verde teñido con espinacas y además unos granos de arro salvaje fritos por encima que le añadían aún más originalidad al bocado, me encantó, nos encantó...



Fue una jornada fantástica, el ambiente que se crea es muy acogedor y familiar y además es un placer compartir estos rtos con personas tan profesionales, solo me queda dar las gracias a Juanjo, a Kike y a Roberto por la oportunidad, estamos emocionados, trabajar y compartir momentos con personas tan profesionales siempre hace que amemos aún más este mundo, gracias una y mil veces!

Os invito a las próximas jornadas, cada último jueves de mes hay una nueva cita, siempre sorprendente y en compañía de buena gente y deliciosos pintxos elaborados con pescado fresco y tés de calidad, algo inusual y digno de ver y probar. Pondré fecha exacta de la próxima, apoyemos y disfrutemos de los negocios locales con ganas y pasión! 

Amaia





domingo, 9 de noviembre de 2014

A Fuego Negro

 Aprovechando un par de días festivos sin escuela, doscomemundos nos animamos a visitar Donosti. Ya había estado hace poco, y me quedaron ganas de volver juntos para poder disfrutar de lo que más nos gusta, comer. Y eso hicimos. Yo os voy a contar nuestra visita a "A Fuego Negro".

 Llegamos siete y pico de la tarde. Estaba el local tranquilo y pudimos primero echar un ojo y curiosear. La verdad que se nota el esmero en hacer el local algo especial. Hay posters personalizados por todo el local (algunos en venta), una vitrina con un monton de cosas curiosas, divertidas y salvajes muchas de ellas como esos ojos clavados en un tenedor o una cortadora de carne un tanto siniestra con el nombre y logo del local. Hay también see encuentra expuesto su "Black cook book", galardonado con el segundo premio a mejor diseño en los "gourmad worl cookbook awards", enhorabuena a todo el equipo por esto, muestra de su interés por la creatividad y hacer las cosas bien, y de honestidad dando a conocer muchas de sus creaciones a lo largo de sus 8 años de historia.
 Bueno una vez ojeado el local nos tomamos un vinito esperando a que la cocina arrancara. Vimos por allí a Edorta, algo que valoramos, ya que nos gusta ver al capitán a bordo de su barco, nose cuestión de confianza.

 
  Bueno y vamos a por la comida. Lo primero que probamos antes de que abrieran cocina fue unos encurtidos caseros en los que nos llamó la atención encontrar avellanas y un huevito de codorniz con una textura brutal. Es un placer que algo tan dejado de lado como los encurtidos tenga su espacio, y no sea una simple oferta de bote de super, ya que hay auténticos apasionados de estos productos.
  Eran ya cerca de las 8 y el camarero nos dio el pistoletazo de salida, podíamos empezar a probar. Empezamos por un arroz de idiazabal con helado de alioli negro y una ensalada de vainas sobre ajoblanco de patata y mojama. El arroz en su punto, muy bien con el helado acompañándolo ya que la diferencia de temperatura en boca es un plus. Y la ensalada muy rica. Unas vainas con color , sabor y textura, la crema gustosa y los trocitos de mojama daban un punto de sal y de sabor más ahumado y profundo que encajaban en boca.



  Nos animamos después con su "Mc Kobe", una miniburguer con una carne de calidad, ya que el olor en la mesa recordaba a txuleta y unos chips crujientes que creemos eran de plátano. Muy rica y muy bueno el punto de la carne, casi sangrante, para ser tan pequeña.


  Ya a estas alturas y cuando estás en un sitio en el que todo sale bien, nos animamos a por otras dos cosas. Su "revival de gamba, huevo y mayonesa" y un ceviche de pollo. El del revival lo degustó Amaia, porque se come entero de un bocado, con palillo y todo!! para que explote la yema en la boca. Fantástica la idea de una versión del típico pintxo de ensaladilla de gambas, muy divertido. El ceviche también me encantó, no era tan ácido como los clásicos condimentados con lima, sino que llevaba naranja y el sabor a maíz estaba super presente, creemos que en la espuma aparte del borde del vaso.



  Y ya para acabar, pero no por ganas de parar de comer, pedimos el txangurro a la donostiarra. Me hizo gracia que el camarero me avisara que el plato consistía en un helado de txangurro, ¡que grande!. Y lo bueno es que al probarlo estaba buenísimo, con todo el sabor y en un formato que te hace sonreír y valorar la originalidad y la apuesta arriesgada de este equipo.


  Y esto fue todo en cuanto a lo que probamos ese día, pero os aseguramos que habrá próximas visitas en las que trataremos de probar todo lo que ofrezca este local, como su menú degustación. Nos ha parecido un sitio vivo y joven, fresco, divertido y con un punto transgresor. Es un bar que ofrece un concepto diferente en el casco viejo de pintxos más famoso de España, tanto en cuestión de comida como de ambiente, decoración... Doscomemundos nos quedamos encantados con este local y os recomendamos visitarlo como sitio para pasar un buen rato probando muchas cosas buenas y diferentes.

sábado, 1 de noviembre de 2014

De nuevo, SUKALKI

Este pasado jueves 30 de Octubre volvimos al restaurante Sukalki, esta vez a comer el menú del día. Como dijimos la última vez, volveríamos y en cuanto hemos tenido día libre doscomemundos no nos lo planteamos dos veces. Llevaba tiempo viendo en su facebook las ofertas de menú que hacen cada día, desde que fuimos aquella noche a cenar no dudé en buscarlos en las redes, a parte de la experiencia de mi comemundos en el horno de 220 con ellos que ya me abrió boca,las suculentas fotos que colgaban nos tenían con los dientes largos... La variedad en los menús es algo que dominan y es que, un menú del día, como bien dice la frase, tiene que ser DEL DÍA, en pocos sitios la frase es fiel a lo que se posa en la mesa y puedo decir que por fín hemos dado con uno de ellos.

Así que al lío, hicimos reserva y aparecimos en la casa Plágaro-Etxenike, cómo la última vez, la atención fue perfecta, esta vez un camarero, para nosotros nuevo, que nos recibió de manera muy cercana y sonriente, la cosa empezaba bien, no esperábamos menos. Ambiente relajado, programa de cocina en la pantalla de televisión y ricos aromas de fondo...

Nos sentamos, no teníamos duda, el menú, pero además, en la carta había un pequeño papel con una serie de preparaciones frescas como por ejemplo; unas navajas, boquerones, ensalada de tomate, boletus a la plancha, mejillones de roca...
Asi qué pedimos unos boquerones a los que ya habíamos echado el ojo en la barra, marinados por ellos y con una pinta estupenda.

Y llegó, la presentación nos pareció estupenda, fresca y original, una bandeja de madera con los entrantes del menú para ir disfrutándolos en el orden que uno quiera, una ensalada de pato con patata cocida, chips de patata morada, un poquito de cebolla, puntas de esparrago triguero, huevo y un aliño de aceite, vinagre y sal, sencillo, fresco y rico. A su lado, un pimiento relleno de bonito y piperrada con un pil pil por encima, este fue meloso y muy sabroso, un buen conjunto y por último, un revuelto de setas con un crujiente de pan, me encantó, tengo debilidad por estos delicados manjares de otoño... Pero es que el huevo, era huevo, color, textura y sabor!



Y como a veces, una imagen vale más que mil palabras, juzgar vosotros...


Creo que no hay mucho más que añadir! Dos eran los segundos entre los que podíamos elegir, una paletilla de cordero o merluza al horno sobre una salsa de calabaza, estábamos "marinos" y los dos elegimos la merluza, además la calabaza es una de esas cosas que nos pierde, la diversidad de tratos que acepta es muy amplia y una crema quizás sea de las más sabrosas...



Punto casi perfecto, a mi, personalmente me gusta un poquito menos cocinada, pero no puedo decir que eso me estropeara el plato, estaba riquísima y la crema deliciosa, hacían un buen conjunto, la merluza con la piel hacia arriba, como tiene que ser, para que se vea la frescura y el color del pez, sobresaliente.

Llegaba el momento "postre", arroz con leche acompañado por un helado de piña que estaba sobre una salsita de frutos rojos y un puñadito de "bolitas" crujientes con sabor a la capa que recubre las moras de gominola que comíamos de pequeños, aquí tuvimos un debate los DOScomemunDOS porque yo estaba convencida de que eran "eso" y él decía que no, luego se nos pasó preguntar! Además creemos que llevaban "peta-zetas" también, sin duda, muy divertido de comer.
El arroz con leche estaba buenísimo, muy suave y perfecto como ración (aunque yo hubiera comido tres o cuatro más) y el helado... PIÑA, es que no sabía a otra cosa, es una maravilla comer así fruta.


Tengo que decir que en las fotos no se aprecian bien los colores, la luz jugó un poco en mi contra y además estuve más preocupada de disfrutar del festín, el colorido y la presentación tienen un lugar importante en la cocina de estos dos artístas así que os invito a que lo comprobéis en vivo y en directo, querréis repetir, nosotros ya estamos esperando la siguiente.

Nos han vuelto a conquistar, salimos con una gran sonrisa, la tripa llena y la sensación de que las cosas, si se hacen con ganas e ilusión parecen fáciles (y no quiere decir que lo sean) pero nos demostraron por segunda vez que SUKALKI es un lugar donde disfrutar de la buena y cuidada cocina, gracias y hasta la próxima chicos!


Amaia.